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Dennis Alvaro, Manuel Paz y Abraham Mejía con el fondo del Obelisco en Buenos Aires. En la otra escena estamos con Carlos Bazay a la entrada del mítico Centenario en Montevideo.

   
CAMINANDO EN BUENOS AIRES Y MONTEVIDEO
 

No conocíamos Montevideo, Uruguay, por tanto tampoco el mítico Estadio Centenario, declarado por la FIFA el 18 de julio de 1983, como Monumento Histórico del Fútbol Mundial.

El partido entre las selecciones de Perú y Uruguay por las eliminatorias al Mundial de Brasil, fue motivo más que suficiente para embarcarnos en una nueva aventura periodística, más allá de cubrir el citado duelo.

Con Dennis Alvaro, colega de profesión, y Abraham Mejía, entrañable amigo, nos trazamos a realizar un viaje distinto, con escala en Buenos Aires, visita al barrio de Boca Juniors, recorrer el Museo Boquense, y luego adentrarse en la historia de Caminito, calle aledaña y motivo de inspiración del inmortal tango que lleva su nombre.

Las caminatas por el Obelisco, la efigie de Eva Perón, luego por las tradicionales calles de Florida, Lavalle y Corrientes, nos llevaron hasta la dirección de este último, 348, donde también se inmortalizó la letra del tango a Media Luz que entonó Carlitos Gardel.

Ni que decir de la visita que hicimos al Gran Café Tortoni con un rico y glorioso pasado de 150 años, enclavado en la Avenida de Mayo, lugar único y preferido por literatos, poetas, periodistas, artistas y bohemios sin par. Pero claro, había que disfrutar una buena parrilla y nos apuntamos al Palacio de las Papas Fritas.

Buenos Aires, pese a los tropiezos socio económicos que atraviesa por estos días, conserva su encanto de ser una gran urbe, con la típica esencia porteña. Nuestra visita de poco más de 48 horas, alcanzó para visitar a la familia de quien en vida fue Daniel Carpio, el gran Carpayo, y último gigante del deporte peruano del siglo que pasó.

En Montevideo, luego de cruzar el Rio de La Plata a bordo de un buquebus, sumamos una nueva y edificante vivencia. El orden y respeto de los uruguayos que es a nuestro modo de observarlos, el principal soporte de esta nación, donde el analfabetismo no existe.

El trato de su gente es de primer nivel. Así lo pudimos comprobar el 10 de junio en el partido por la sexta fecha premundialista. Ningún desmán, ni antes, durante o después de la competencia. La educación del público uruguayo fue puesta de manifiesto al momento de escucharse el Himno Nacional de Perú. Ninguna pifia ni nada por el estilo. Un respeto único, como no sucede en nuestro medio. Sin duda alguna, este viaje resultó una clara lección de vida. Y por supuesto que nos quedan en el tintero muchas sabias anécdotas. Porque hasta el dinero invertido, como nos dijo Rubén Techera, ex Universitario de Deportes: dinero gastado en un viaje, es dinero bien gastado.(Ver fotos y video).   

   
 
 
Palermo en un mural del Museo Boquense. Derecha en la visita al campo del estadio de La Bombonera.
     
 
  El corredor de murales y el auditorio para eventos especiales es impresionante.
     
 
  En la famosa calle Caminito del barrio de Boca, degustamos un almuerzo típico.
     
 
  Con el fondo de Evita Perón. A la derecha, en el famoso Gran Café Tortoni.
     
 
  Con la familia del gran Carpayo. Derecha en el buquebus rumbo a Montevideo.
     
 
  En una parrilla uruguaya. Con un hincha charrúa antes de ingresar al Centenario.
     
 
  Centenario imponente. Derecha la Plaza Salvo en pleno corazón de Montevideo.